24 de febrero 2009. -La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) ha publicado fragmentos de un informe del Gobierno estadounidense que revela las duras técnicas de interrogatorio utilizadas en Iraq, Afganistán y Guantánamo.
Los documentos, adquiridos por la ACLU gracias a una petición según la Ley de Libertad de la Información (FOIA), incluyen un informe del vicealmirante Albert T. Church, a quien se le requirieron los papeles para llevar a cabo un análisis exhaustivo de las operaciones de interrogatorio del Departamento de Defensa.
Church cataloga específicamente los interrogatorios en la Base Aérea Bagram en Afganistán de "claramente abusivos, y evidentemente no ajustados a ninguna política o instrucción aprobada para interrogatorios".
Esta difusión de la ACLU aparece el mismo día en que se produjo una importante descarga de documentos, según la FOIA, por parte de otros tres importantes grupos de derechos humanos.
Según el contenido de diversos documentos, el Pentágono dirigió prisiones secretas en Bagram e Iraq, colaboró con el programa de "detenciones fantasma" de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, de sus siglas en inglés), y también el personal de Defensa retrasó la liberación de un prisionero para impedir mala publicidad.
"En ambos casos, por ejemplo, (los prisioneros) fueron esposados a objetos fijados por sobre sus cabezas a fin de mantenerlos despiertos" dice el documento.
Igualmente, sostiene que los "interrogatorios en ambos incidentes involucraron el uso de violencia física, incluyendo patadas, golpizas, y el uso de golpes de sumisión" que incluyeron golpes en las "piernas (de los prisioneros) con las rodillas (de los interrogadores)", estas últimas, íntimamente relacionadas con el fallecimiento de los prisioneros.
"En un caso, un embolismo pulmonar se desarrolló como consecuencia de la lesión traumática contundente, y en el otro caso una enfermedad de arteria coronaria fue complicada por la lesión traumática contundente", agrega.
A través de un comunicado de prensa, la ACLU resumió los documentos como un detalle de: "(Una) investigación de dos muertes en Bagram. Se determinó que ambos detenidos habían sido muertos por embolismo pulmonar causado como resultado de estar de pie encadenados, privados de sueño y de docenas de palizas por guardias y posiblemente interrogadores".
También revela el uso de tortura en la ilegal base de Guantánamo y en prisiones estadounidenses-afganas en Kabul.
Igualmente, el comunicado agrega la investigación del homicidio u homicidio involuntario del detenido Dilar Dababa por fuerzas de EE.UU. en el 2003 en Iraq. Indagación iniciada luego de afirmaciones recibidas de que el prisionero fue sometido a tortura y abuso en The Disco (ubicado en el Complejo de la Fuerza de Operaciones Especiales, en el Aeropuerto de Mosul, Iraq).
"El abuso consistió en llenar su mono de hielo, luego remojarlo con la manguera y hacer que estuviera de pie durante prolongados periodos, a veces frente a un acondicionador de aire; obligarlo a acostarse y a beber agua hasta que se atragantaba, vomitaba o se ahogaba, golpear su cabeza contra una placa de acero caliente mientras estaba encapuchado y era interrogado; obligarlo a levantar repetidamente las piernas con bolsas de hielo sujetas a sus tobillos, y patearlo cuando ya no podía más", describe.
Se precisa otro análisis de declaraciones de tortura y abuso que tuvieron lugar en el 2003 en Abu Ghraib, que estableció una probable causa para creer que fuerzas de Estados Unidos (EE.UU.) cometieron homicidio en el 2003 cuando participaron en la atadura del detenido Abed Mowhoush en un saco de dormir durante un interrogatorio, causando su muerte por asfixia.
"Una gran parte de la tortura, mutilación, y asesinato de detenidos ocurrió bajo órdenes dadas siguiendo reglas secretas de enfrentamiento en el Pentágono", escribió Scott Horton, editor colaborador de Harper's magazine.
Los documentos, adquiridos por la ACLU gracias a una petición según la Ley de Libertad de la Información (FOIA), incluyen un informe del vicealmirante Albert T. Church, a quien se le requirieron los papeles para llevar a cabo un análisis exhaustivo de las operaciones de interrogatorio del Departamento de Defensa.
Church cataloga específicamente los interrogatorios en la Base Aérea Bagram en Afganistán de "claramente abusivos, y evidentemente no ajustados a ninguna política o instrucción aprobada para interrogatorios".
Esta difusión de la ACLU aparece el mismo día en que se produjo una importante descarga de documentos, según la FOIA, por parte de otros tres importantes grupos de derechos humanos.
Según el contenido de diversos documentos, el Pentágono dirigió prisiones secretas en Bagram e Iraq, colaboró con el programa de "detenciones fantasma" de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, de sus siglas en inglés), y también el personal de Defensa retrasó la liberación de un prisionero para impedir mala publicidad.
"En ambos casos, por ejemplo, (los prisioneros) fueron esposados a objetos fijados por sobre sus cabezas a fin de mantenerlos despiertos" dice el documento.
Igualmente, sostiene que los "interrogatorios en ambos incidentes involucraron el uso de violencia física, incluyendo patadas, golpizas, y el uso de golpes de sumisión" que incluyeron golpes en las "piernas (de los prisioneros) con las rodillas (de los interrogadores)", estas últimas, íntimamente relacionadas con el fallecimiento de los prisioneros.
"En un caso, un embolismo pulmonar se desarrolló como consecuencia de la lesión traumática contundente, y en el otro caso una enfermedad de arteria coronaria fue complicada por la lesión traumática contundente", agrega.
A través de un comunicado de prensa, la ACLU resumió los documentos como un detalle de: "(Una) investigación de dos muertes en Bagram. Se determinó que ambos detenidos habían sido muertos por embolismo pulmonar causado como resultado de estar de pie encadenados, privados de sueño y de docenas de palizas por guardias y posiblemente interrogadores".
También revela el uso de tortura en la ilegal base de Guantánamo y en prisiones estadounidenses-afganas en Kabul.
Igualmente, el comunicado agrega la investigación del homicidio u homicidio involuntario del detenido Dilar Dababa por fuerzas de EE.UU. en el 2003 en Iraq. Indagación iniciada luego de afirmaciones recibidas de que el prisionero fue sometido a tortura y abuso en The Disco (ubicado en el Complejo de la Fuerza de Operaciones Especiales, en el Aeropuerto de Mosul, Iraq).
"El abuso consistió en llenar su mono de hielo, luego remojarlo con la manguera y hacer que estuviera de pie durante prolongados periodos, a veces frente a un acondicionador de aire; obligarlo a acostarse y a beber agua hasta que se atragantaba, vomitaba o se ahogaba, golpear su cabeza contra una placa de acero caliente mientras estaba encapuchado y era interrogado; obligarlo a levantar repetidamente las piernas con bolsas de hielo sujetas a sus tobillos, y patearlo cuando ya no podía más", describe.
Se precisa otro análisis de declaraciones de tortura y abuso que tuvieron lugar en el 2003 en Abu Ghraib, que estableció una probable causa para creer que fuerzas de Estados Unidos (EE.UU.) cometieron homicidio en el 2003 cuando participaron en la atadura del detenido Abed Mowhoush en un saco de dormir durante un interrogatorio, causando su muerte por asfixia.
"Una gran parte de la tortura, mutilación, y asesinato de detenidos ocurrió bajo órdenes dadas siguiendo reglas secretas de enfrentamiento en el Pentágono", escribió Scott Horton, editor colaborador de Harper's magazine.